Yo un vez me meti con mi novio a coger atrás de la biblioteca, y cuando ya estábamos vistiéndonos, apareció un policía que nos quería torcer. No se si lo que quería era que se la mamaramos, o le soltaramos varo. Tuvimos que escaparnos corriendo, a lo que nos gritó «pinch*s p*toooooss»