CinicoDulcerdo

Yo suelo coger con un vecino que vive en el mismo edificio. Es profesor, a veces voy a su depa antes de que se vaya a trabajar, le prende mucho que lo mire a los ojos mientras le lamo los pezones. También disfruta darme poppers mientras tengo su verga en mi boca, dice que le encanta hacerlo por qué me pongo bien putito y aguanto más su verga. La tiene enorme, por suerte son de las que lubrica mucho.
Lo malo es que solo se viene una vez, me gustaría mucho que me batiera sus mecos.

Uff que ricas tus experiencias bisexswcdmx, manda mensaje hay que armar algo.
Estaba morrito, iba en el cch sur y recién había tenido mis primeras experiencias en el cruising (en el metro, nada del otro mundo). Me había subido en la estación de cu rumbo a Balderas, eran las 7:15pm más o menos cuando el metro se queda atascado en Copilco. De golpe, un chingo de banda lleno el metro; universitarios, osos, twinks, chacales, dones… todos apretujados empujándonos de un lado a otro mientras esperábamos que el tren avanzará. Yo estaba entre resignado y ansioso (no era mi primer experiencia en esa línea) cuando sentí la primer mano rosandome por encima del pantalón cerca de mi verga, con audífonos y celular en mano me dejé tocar sin poner resistencia. Recién comenzó a avanzar el metro comencé a sentir más manos acariciándome, torpemente intentaron quitarme el cinturón consiguiendo a penas aflojarlo cuando el metro se detuvo de golpe entre estación y estación, quedamos a oscuras y en un descuido me desabrocharon el cinturón y el metro volvió a andar, a penas pude sostenerme con una mano del techo, mientras con la otra intentaba subirme el pantalón que ya me habían bajando hasta las rodillas. Comenzaba a sentirme incómodo y nervioso, pero el morbo era mucho que deje que me hicieran lo que pudieron mientras forcejeaba por subirme el pantalón y no caerme o soltarme. Mientras me tocaban o me metían sus dedos ensalivados.
Un vato me tomó por la cadera con su mano y me jaló hacia él, sentí el calor de su pelvis cuando los poppers me estaban pegando. Sentí su verga punzante escurrir de precum sobre mi nalga y al vato acomodándose detrás de mi, intentando metermela torpemente. Algún espectador (y esto fue lo que más me prendió) tomo la verga del vato y la llevo hasta mi ano. Lo sentí entrar, casi como mantequilla, me tomó con ambas manos por la cintura antes de hundir su verga en mi…, me di cuenta que me tenía ahí frente de todos, casi desnudo bien ensartado, mientras me tocaban y besaban, cerré los ojos y dejé de forcejear.
Me estuvo cogiendo en los ratos que el metro de quedó atorado entre estación y estación. El vato gemía detrás de mi cuello, me ponía la piel de gallina y eso lo hacía embestirme con más fuerza, cada vez más rápido hasta que lo sentí descargarse en mi poco antes de llegar a la siguiente estación.
El wey me sacó la verga cómo si nada, luego sentí entrar otra, mucho más gruesa aunque no tan grande, me trague mis gemidos y mire de reojo al vato que me la metió primero bajarse del metro mientras entraba otra oleada de personas. Sentí la respiración del don en mi nuca, algunas manos me pellizcaban los pezones, me masturbaban o me metían ocasionalmente un dedo o dos junto con la verga del don. Escuché a uno de ellos venirse y vi como usaron sus mecos para lubricar más mi culo, el don derramó sus mecos dentro de mi, apreté el culo mientras me la sacaba, no quería derramar ni una sola gota, cuando la tercera verga me hizo su putito en ese viaje, bombeandome hasta Indios Verdes.